Este martes, la Cámara de Casación Penal de Entre Ríos ordenó la inmediata detención del ex gobernador Sergio Urribarri y su cuñado, Juan Pablo Aguilera. Ambos fueron condenados en 2022 a ocho años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. La detención se realizó en horas del mediodía en la vivienda de Urribarri en Concordia.

La justicia provincial dispuso la prisión preventiva, ya que la condena aún no está firme. La presidenta de la Cámara de Casación, Marcela Davite, comunicó la orden al jefe de la Policía de Entre Ríos, instruyendo que Urribarri sea alojado en la Unidad Penal 1 de Paraná.

Juan Pablo Aguilera, también condenado en la misma causa, fue detenido al igual que Urribarri. El ex gobernador fué trasladado a la Jefatura Departamental de Concordia, a la espera de su traslado a la cárcel de Paraná. La detención se llevó a cabo sin incidentes, cumpliendo con la orden judicial.

La causa que llevó a la condena de Urribarri y Aguilera ha sido un tema de gran relevancia en la provincia, destacando la lucha contra la corrupción y la impunidad. La detención de estas figuras políticas marca un hito en la aplicación de la justicia en Entre Ríos.

La comunidad y los medios de comunicación siguen de cerca el desarrollo de este caso, que continúa generando impacto y debate en la sociedad entrerriana. La expectativa ahora se centra en los próximos pasos judiciales y el cumplimiento de las sentencias dictadas.

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